domingo, 30 de agosto de 2009

Mansión Victoriana (V). Salón


Desde el distribuidor se accede al salón. Un espacio destinado al descanso, donde disfrutar de una pieza al piano o jugar una partida de ajedrez delante de la cálida chimenea.




El suelo, como el del resto de las habitaciones, es de tablas de madera barnizadas. El papel de motivos florales, al igual que la alfombra tejida por mí a punto de cruz sobre cañamazo y los cojines que encontré en la tienda de juguetes "Asis", en Madrid. Allí también encontré las dos sillas que acompañan a la mesa de ajedrez.




El resto de la habitación está compuesta por la chimenea, en cuya repisa descansan unos tibores y dos figurillas de porcelana que compré en "Singing Tree", la tienda de Londres de la que ya he hablado en otras entradas. Sobre la chimenea cuelga un cuadro (el único de la estancia por ahora) del río Moldava, cuya lámina encontré en una tiendita del barrio judío de Praga. En esa misma pared un piano para amenizar tranquilas veladas.



En las paredes laterales, una vitrina que exhibe una colección de minerales (otra de las aficiones de la dueña de la casa) y para la que utilicé un souvenir de los que se consiguen en los museos, donde como ya he comentado se encuentran cosas estupendas para utilizar en nuestras casitas. En este caso un cartoncillo lleno de diminutos trozos de minerales en la sección de geología de un museo de Ciencias Naturales.







En la pared de enfrente un magnífico sofá de la artesana española Carmen Infante y una mesa sobre la que descansa una preciosa botella de cristal italiano.




Por último, la señora de la casa (extraordinaria muñeca de la también española Elena Pastor) contempla su acogedor salón, donde pasa tan buenos momentos jugando al ajedrez, disfrutando del piano, admirando su preciada colección de minerales o leyendo algún libro en su estupendo sofá.



martes, 11 de agosto de 2009

Las bolsas de "El Gusano Alegre"

Este verano he podido dedicarle bastante tiempo a mis miniaturas. Y entre otras muchas cosas he realizado unas bolsas de papel de una tienda. Las hice como regalo a mi amiga Conchy y su fantástica tienda de miniaturas El Gusano Alegre.
A partir del papel de la tienda y después de las fotocopias reducidas necesarias, recorté y pegué hasta montar un recortable igual a un modelo que había elegido de los imprimibles que hay en la red.
A final como cualquier imprimible, sólo recorté y pegué. Para las asas usé tiritas del papel original para que no se viera un lado de color y otro blanco.